InfluenceMAp seleccionó a las 20 multinacionales que abogan de manera activa y comprometida por una política climática ambiciosa. Unilever, Tesla, Coca Cola, Nestle, Siemens, Apple, Google, IKEA y Amazon, entre los más conocidos.
El Acuerdo de París fijó una serie de objetivos que requieren del accionar de todos los actores y no solo de los gobiernos. En este sentido, la influencia de una corporación en la política climática puede ser tan importante como tomar medidas para reducir su propia huella física. Así lo sostiene InfluenceMap en su reciente informe A-List of Climate Policy Engagement en el que seleccionó a los 20 líderes de negocios más comprometidos que abogan por una legislación ambiciosa en la temática a nivel mundial.
"Este mapeo de la A-List es un paso críticamente importante hacia la evolución de una radiografía continua de los esfuerzos empresariales para influir en las políticas públicas sobre el clima y las agendas relacionadas", explicó John Elkington, Presidente de Volans.
La elite de presión
En esta primera edición, los puntajes más altos fueron obtenidos por Apple (94), IKEA (91), Tesla (89) y GSK (88). Siguieron Unilever y las empresas de servicios públicos EDP y EnBW con un 86 cada una. Detrás vinieron SSE (85), Amazon (83), Deutsche Telekom (83), National Grid (80), Coca -Cola (79), Nestlé (74), Google (74), Iberdola (73), Enel (73), AkzoNobel (71), Royal DSM (69), ABB (67) y Siemens (65).
Para elegir a las protagonistas del estudio, InfluenceMap se dio a la tarea de indagar en torno a más de 30,000 puntos de datos y divulgaciones de 300 empresas globales y 75 asociaciones comerciales líderes.
Este exhaustivo análisis de cada una de ellas arrojó un "puntaje total" que expresa cuán comprensiva u obstructiva es la compañía con respecto a la política climática estatal, nacional o regional alineada con el Acuerdo de París. Esto también implicó poner bajo la lupa a las asociaciones comerciales con las que se vincula y la 'Intensidad de Compromiso' de la corporación, que expresa la intensidad de esta actividad, ya sea positiva o negativa.
De esta forma, para entrar en la clasificación, cada una de las instituciones debió demostrar liderazgo en su sector, respaldo suficiente a legislaciones ambiciosas y un activismo estratégico. Por el contrario, los vínculos estratégicos con las asociaciones comerciales que se oponen de manera flagrante a la política climática podrían descalificar a una empresa de la carrera.
En carrera
El listado se actualizará semestralmente y se espera que la próxima entrega sea en septiembre de este 2018 con un posible plus de diez compañías. La edición actual del informe también presentó 20 empresas que probablemente entren en versiones futuras del Top 20, pero que actualmente están siendo retenidas de alguna manera.
Entre estas últimas se listaron a Deutsche Post, Moller Maersk Group, Honda Motor, Nissan, Vinci, PepsiCo, Suncor Energy, Statoil, ENI, Johnson & Johnson, United Technologies, Microsoft, LafargeHolcim, BHP, Walmart, H&M, Vodafone Group, Verbund, Edison International y EDF.
Así, por ejemplo, los nombres estadounidenses de primera línea Walmart, Johnson & Johnson y PepsiCo respaldan políticas ambientales, pero no son tan estratégicamente activos al hacerlo como sus homólogos de la Lista A.
Por otro lado, los lazos con las asociaciones comerciales o los grupos de presión que se oponen a la política climática tuvieron una influencia negativa en el ranking para Microsoft, Nissan, Honda y Moller Maersk. En el caso de Microsoft particularmente, desde el informe subrayaron que tiene una fuerte red de poderosos grupos comerciales intersectoriales que se oponen a la legislación ambiental, como la Cámara de Comercio de Estados Unidos, que Apple ha denunciado públicamente.
