Por medio de su programa sin Fronteras, ya insertó a más de 100 personas y orientó laboralmente a más de 550.
De la mano de su programa “Sin Fronteras, Manpower continúa invitando a sus clientes a la inclusión de refugiados y solicitantes de asilo dentro de su fuerza laboral.La iniciativa, lanzada en 2007, incluye actividades de capacitación y formación de las personas que llegan al país, claves para orientarlas en la búsqueda de empleo.
Desde entonces, el programa ha logrado emplear a más de 100 personas y orientar laboralmente a más de 550 participantes. La iniciativa también creció puertas adentro. A ella ya se sumaron más de 70 voluntarios como capacitadores en los talleres que se dictan.
“Muchas de las personas que vienen no necesariamente saben a qué se van a enfrentar cuando comienzan un proceso de selección de personal, cómo comportarse correctamente en una entrevista, qué se debe poner en un CV o por qué se les hace un examen médico. Son cuestiones que abordamos para que estén preparados y que la búsqueda sea exitosa”, explicó Daniela Tawaderseh, Analista de Diversidad e Inclusión Laboral de Manpower, quien ubica la cantidad de personas en esta situación de migración en torno a los 3.500 casos.
Según la Convención de Ginebra sobre el Estatuto de los Refugiados, un refugiado es una “persona que se encuentra fuera de su país de nacionalidad o residencia habitual, tiene un fundado temor de persecución a causa de su raza, religión, nacionalidad, pertenencia a un determinado grupo social u opiniones políticas, y no puede o no quiere acogerse a la protección de su país; o retornar a él por temor a ser perseguido”. |
Se trata de una población vulnerable de gran diversidad. Provienen de alrededor de 60 países de África, América, Asia y Europa. Actualmente, el mayor número de solicitudes de asilo proviene de Colombia y de diferentes países de África. Esta pluralidad se refleja en la variedad de perfiles que se presentan y que incluye desde profesionales con un gran manejo de idiomas a no profesionales.
“La mayoría dejó a su familia en el país de residencia habitual. Muchos tenían una situación económica acomodada y hoy de repente se encuentran viviendo en una pensión, sin tener dinero para poder movilizarse o vivir, y se encuentran buscando un trabajo de lo que sea para poder sostenerse económicamente”, señaló Tawaderseh. En Manpower, se los forma para que logren capitalizar esas experiencias y no dejar que esa carga emocional obstruya el camino de conseguir un trabajo.
La tasa de éxito ha ido en aumento desde que comenzaron a trabajar con estos colectivos en 2007. Ese año firmaron un acuerdo con el ACNUR, donde se reconocía a la compañía como “Empresa Solidaria con las personas refugiadas en Argentina”. El 2012 fue el año con mayores inserciones laborales, logrando emplear a 22 individuos. Un rubro fuerte en este aspecto ha sido el de turismo, en todas sus variantes, desde hotelería a gastronomía. Ha resultado beneficiosa para esta industria la cantidad de idiomas que manejan estas personas.