El trabajo con la cadena de valor, la reutilización de residuos y la gestión puertas adentro fueron algunos de los grandes hitos de este informe 2013, elaborado bajo los lineamientos de la guía G4.
En plena temporada alta de presentación de reportes, Odebrecht Argentina lanzó su quinto informe de sostenibilidad, “Obras que dejan huella”, en el cual reflejaron los resultados que obtuvieron en términos económicos, sociales y ambientales durante el 2013. Para hacerlo posible, se basaron en los lineamientos del GRI y en la flamante guía G4.
“El informe tiene que ver con un avance en términos de la implementación de la Guía G4 en su modelo Esencial, siendo la única empresa en el rubro de ingeniería y construcción que reporta y que lo hace con esta metodología”, destacó Lucas Ignacio Utrera, Gerente de RSE y Sustentabilidad de Odebrecht Argentina. Este desarrollo le significó a la compañía profundizar el trabajo con una matriz de materialidad, con consultas y relevamientos a grupos de interés, un ejercicio que esperan ahondar para el próximo reporte.
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“Odebrecht es una organización muy dinámica, es sumamente variable lo que puede ser relevante de un año a otro en términos de proyectos”, apuntó Utrera. Pese a esta particularidad de la compañía, este año uno de los puntos más destacados fue la mayor consistencia y transparencia que se logró gracias a una mayor información generada por auditorías recibidas por clientes y realizadas desde la empresa a subcontratistas, en términos de salud, seguridad y medio ambiente. Para el próximo año, la compañía considera central seguir trabajando con su cadena de valor que en el 2013 contó con la identificación de 2.634 contratistas y proveedores.
Desafíos a medida
La complejidad y variedad de emprendimientos hacen que cada iniciativa se presente como única en términos de lo que puede hacerse. “El desafío es tratar de encontrar una homogeneidad respetando la complejidad y diversidad de sus proyectos”, remarcó el responsable de Odebrecht. Esto hace que la gestión de las distintas dimensiones varía de acuerdo al tipo de contrato y cliente, por lo que la empresa ha desarrollado herramientas a nivel organizacional y desde el ámbito corporativo para tratar de darles una misma orientación.
Así, por ejemplo, mediante el Fondo de Inversión para el Desarrollo Sustentable y la premisa de las 3R (reducir, reutilizar y reciclar) que rige en todas las obras, se hizo posible el reaprovechamiento del 100% de los residuos ferrosos y eléctricos de la obra Sistema Potabilización del Área Norte.
En lo referido a inversión social, Odebrecht tuvo tres grandes focos: el Programa Creer que se orienta a la formación de oficios en la construcción según las necesidades de las obras, el Programa Reciclar que busca darle valor social a los residuos y restos que se generan, y el Programa incluir que apoya emprendimientos socioproductivos en las comunidades donde la compañía está presente. En este último se enmarca la puesta en marcha de la planta artesanal de alimentos de mar en la localidad de Camarones, Provincia de Chubut. “La planta es un hecho. Está sirviendo para que pequeños productores procesen y para que los jóvenes de la escuela no solamente aprendan y hagan sus prácticas ahí, sino que además puedan darle valor agregado a la producción propia que tiene la escuela”, señaló Utrera.
Además de estas acciones, la empresa se encuentra en un año de transición en el que algunos proyectos terminan y otros están comenzando y en proceso de empezar. Entre los que se buscan dar inicio, se destaca la posibilidad de articular con una cooperativa de residuos locales de Buenos Aires para que se encarguen de todos los residuos de obras. Otro punto de interés está puesto en buscar nuevas iniciativas similares a la de Camarones de acuerdo a las nuevas distribuciones que se generarán donde se asiente el nuevo gaseoducto.
Puertas adentro de la empresa, Odebrecht también trabajó de manera intensiva, lo que le permitió volver a ser reconocida como una de las 10 mejores empresas para trabajar según el Instituto Great Place To Work. En este aspecto, la cuestión de género se presentó como una temática importante. Aunque cuenta con una plantilla compuesta en un 80% por hombres, las mujeres están teniendo cada vez más espacio. De hecho, en el holding de Brasil la cuota es mayor, incluso en puestos de mando. Sin ir más lejos, Marcela Drehmer, su CFO fue elegida como la CFO del año 2014 por Latin Trade.
Esta nueva entrega también tuvo mejoras en términos comunicacionales. Con un upgrade de su portal, lo convirtieron en un sitio más interactivo y vinculado a redes social para que sea un canal de consulta y diálogo con grupos de interés. De esta forma, el informe contribuye a la “Visión 2020” de la organización con la que busca convertirse en un referente mundial.
