En 2017, la compañía cumplió su objetivo al 2020 de vender más de 1,5 automóviles electrificados en un año. Lo hizo gracias al aumento en un 8% de la comercialización de vehículos electrificados con respecto al 2016.
Toyota cerró el 2017 con un récord en la venta de vehículos electrificados: vendió nada menos que 1,52 millones de unidades en todo el mundo durante el 2017. El número no solo significa un salto del 8% con respecto a 2016, sino que es el segundo año consecutivo de crecimiento.
“En poco más de 20 años, hemos visto cómo las ventas de vehículos electrificados han aumentado de menos de 500 unidades en un solo país a más de 1,5 millones en más de 90 países y regiones. Se trata de toda una declaración por parte de nuestros clientes en lo que se refiere a la calidad, la durabilidad y la confiabilidad de nuestros modelos electrificados y, gracias a ello, hemos podido establecer cimientos sólidos y sostenibles para la producción en serie de una gama más diversa de estos vehículos en toda nuestra gama de cara al futuro”, expresó Shigeki Terashi ,Vicepresidente Ejecutivo de Toyota Motor Corporation.
Este hito hizo que se alcanzara antes uno de los objetivos del Desafío Medioambiental Toyota 2050. Previsto inicialmente para el 2020, la comercialización de más de 1,5 millones de autos en un solo año llegó tres años antes de lo esperado.
A la fecha, las ventas acumuladas de Toyota y Lexus electrificados ya superan los 11,45 millones. Esto se traduce en una reducción de más de 85 millones de toneladas de CO2 en comparación con las ventas de vehículos convencionales equivalentes.
Desde la introducción de su primer eléctrico, el híbrido Prius, en 1997 en Japón, Toyota ha trabajado para mejorar la tecnología como base para su estrategia de electrificación. En esta búsqueda, también lanzó el primer vehículo de celdas de combustible producido en serie en 2014, el Mirai, la cuarta generación del Prius en 2016 y la segunda generación del Prius plug-in hybrid en 2017.
Además de seguir impulsando el desarrollo y la diversificación de este tipo de coches, la automotriz trabaja en paralelo en la producción en serie de vehículos eléctricos con batería (BEV). Y el sueño tiene fecha: a partir de 2020 desembarcará por China y la India, para seguir por Japón, Estados Unidos y Europa.
Su estrategia de una mejor y mayor diversificación de las opciones con motor eléctrico está ligada directamente al Toyota Environmental Challenge 2050. En el marco del mismo, espera alcanzar unas ventas anuales de vehículos electrificados de 5,5 millones de unidades para el 2030.
Para llegar a ese objetivo, la compañía apunta a tener un total de diez modelos con batería a la venta a principios de la próxima década, y a partir del 2025, contar con una versión electrificada disponible en todos los modelos de su gama mundial.