Un reciente estudio de la agencia Irena difundió que esta industria dio trabajo a seis millones y medio de personas en el 2013. La energía fotovoltaica y los combustibles son los que demandan más gente.Y los países que más empleo generan son China y Brasil
Con los efectos de las crisis económicas todavía vigentes y la preocupación de muchos países para vigorizar sus mercados laborales, las energías renovables se presentan como una gran oportunidad ante este panorama. Así lo sostiene el reciente estudio “Energías renovables y trabajos: revisión anual 2014” de la Agencia Internacional de Energías Renovables (IRENA). En él, estiman que en 2013 aproximadamente 6.500.000 empleos existieron gracias a esta industria, un número que ha crecido exponencialmente de los 5.700.000 que representaban en el 2012.
“Con 6.500.000 de personas trabajando directa o indirectamente en las energías renovables, se está probando que el sector ya ha dejado de ser un nicho y se está convirtiendo en un empleador de peso a nivel mundial”, sostuvo Adnan Amin, Director General de IRENA. Y es que, en efecto, las energías verdes se están extendiendo por el globo, aunque hacen falta más compromiso, investigación y políticas que fomenten este desarrollo.
Los cambios regionales, los realineamientos en las industrias, la creciente competencia y los avances tecnológicos y de procesos de fabricación que ha habido a lo largo del 2013, han llevado a que ciertos sectores y países sean los protagonistas de esta onda verde alternativa. Así, el grueso de empleadores se concentra en unos pocos lugares: China (2.640.000 empleos), Brasil (894.000), Estados Unidos (625.000), India (391.000), Alemania (371.000), España (114.000) y Bangladesh (114.000). Y del mismo modo, la industria solar fotovoltaica (2.273.000) y la de biocombustibles (1.453.000) son las más fértiles.
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Otra particularidad es que las dos potencias del BRIC que lideran la tendencia tienen mucho que ver con el desarrollo de los sectores alternativos de más peso. De hecho, la mayor parte de los empleos de la producción fotovoltaica en 2013 se dio en China. Allí, además del incremento sostenido en la generación de trabajo, una creciente demanda está absorbiendo la sobreoferta de paneles. IRENA atribuye este avance significativo en parte al incremento anual en la actividad de instalación y fabricación que el país tiene, junto con las diferencias metodológicas que están surgiendo en torno a los empleos.
En cuanto a los biocombustibles, mientras el mayor productor es Estados Unidos, la industria basada en la caña de azúcar de Brasil es el mayor empleador. El bioetanol genera 539.000 puestos de trabajo directos y el biodiesel 82.000. Sin embargo, la creciente mecanización en el país vecino se traduce en una reducción en los puestos de trabajo en la producción de materia prima. Además, la energía eólica también está floreciendo, pero en un distante segundo puesto con un estimado de 32.000 empleos.
Por otro lado, la industria del viento también está siendo desarrollada en otros países y viene a engrosar los puestos de trabajo a nivel mundial (834.000), junto con biomasa (782.000), calefacción y refrigeración solar (503.000) y biogás (264.000). Con esto en perspectiva, el estudio subraya el rol que las eco-energías juegan en el crecimiento de la economía global. “Las revelaciones sobre los cambios que se están dando en los segmentos de la cadena de valor revelados en el reporte son cruciales para el desarrollo de políticas que fortalezcan el crecimiento de empleos en este importante sector de la economía”, comentó Amin al respecto.
