Toyota Motor, Siemens, Johnson Controls, Schneider y Panasonic lideran el ranking Clean 200, elaborado por Corporate Knights. De la región, Brasil dice presente con tres representantes.
La economía global se encuentra en un cambio de su matriz energética. En los últimos cinco años, y con un impulso dramático antes y después de la COP21, un movimiento de inversores institucionales e individuales, representando más de U$3.4 billones en activos, han retirado parte de sus inversiones en combustibles fósiles y se han comprometido a desinvertir el saldo en los próximos cinco años. El corolario de esto es una re inversión en las opciones verdes.
La adaptación de grandes inversores PFZW, el fondo de pensión holandés de US$183.000 millones se ha comprometido a reducir a la mitad su huella de carbono al 2020 a la vez que cuatriplicará sus inversiones en soluciones climáticas. Como parte de un acercamiento multifacético para alinear su portfolio a las realidades de mercado provocadas por el cambio climático, CaISTRS anunció que deparará US$2.500 millones a un Índice de Bajo Carbono ABP introdujo un precio interno al carbono para sus gestores de activos en 2015, diseñado para reducir la huella de CO2 de sus tenencias de inversiones de cartera en un 25%, como así también doblar en €29.000 millones las participaciones en acciones que provean soluciones ambientales y sociales en los próximo cinco años. AXA desinvirtió de todos sus valores de carbón (compañías mineras y de servicios eléctricos que derivan más del 50% de su facturación del carbón) en 2015 y se comprometió a triplicar sus inversiones verdes al 2020. |
Con el fin de poner la lupa en este panorama, Corporate Knights y As You Sow presentaron la primera edición de The Carbon Clean 200. En base a los datos del Bloomberg New Energy Finance (BNEF), presentaron a las 200 mayores compañías a nivel mundial, ranqueadas por el total de sus ganancias provenientes de fuentes ecoamigables.
"Nuestra intención con The Clean200 es comenzar una conversación que defina qué empresas serán parte del futuro de energía limpia. The Clean200 invierte la 'burbuja de carbono'. La lista está lejos de ser perfecta, pero empieza a mostrar cómo es posible acelerar y sacar provecho de la mayor transición energética que se ha dado desde la revolución industrial", declaró Andrew Behar, Director General de As You Sow.
El documento tendrá una actualización trimestral y para ser elegibles, las evaluadas deben tener una capitalización de mercado mayor a US$1.000 millones y obtener más del 10% de sus ganancias totales a partir de fuentes alternativas.
En este primer pantallazo, el ranking usó filtros negativos que excluyeron todas las que se desempeñan en los rubros de petróleo y gas y aquellas de servicios que generan menos del 50% de su electricidad de fuentes verdes. Así también quedaron fuera de las posibilidades las 100 principales empresas de carbón medidas por sus reservas y las 100 mayores fabricantes de armas. También fueron rechazadas las rezagadas en temáticas de deforestación, labor forzado o trabajo infantil y las organizaciones que se involucran en el lobby climático negativo.
Las pioneras
Bajo estos criterios, Toyota Motor, Siemens, Johnson Controls, Schneider, Panasonic, Emerson, Vestas Wind, Philips Lighting, Abb y Koninklijke se consolidaron en el Top 10. España fue el país hispanohablante mejor posicionado de la mano de Gamesa en el puesto 19 y EDP Renovaveis en el 53. En cuanto a la región, Brasil fue el único que se hizo de lugares en el 102 con WEG SA, en el 107 con Sao Martinho y en el 135 con CPFL Energias.
De este modo, un total de 26 países se encuentran representados, con un tercio de la lista compuesto por empresas chinas (66 en total), lo que habla de una floreciente revolución en la mayor economía mundial. En términos de volumen, también se destacaron 40 de Estados Unidos, 20 de Japón, 8 de Alemania, 7 de la India y 5 de Canadá.
Desde el informe, señalan que el propósito de profundizar este diálogo amplio y dinámico sobre cómo los inversores pueden ayudar en la co-creación de este nuevo paradigma se debe a que aunque el justificativo moral para la transición ha sido bien argumentado, el caso económico continúa siendo menos claro.
"El Clean200 casi triplicó el rendimiento de su contraparte de combustibles fósiles en los últimos diez años, lo que demuestra que las compañías de energía limpia están proporcionando recompensas concretas y medibles a los inversores. Lo que es más, la destacada actuación de esta lista muestra que la noción de que los inversores deben sacrificar las ganancias a la hora de invertir en energías limpias es obsoleta. Muchas de las inversiones en energía limpia son rentables ahora, y anticipamos que en el largo plazo su atractivo solo subirá, a medida que las tecnologías mejoran y más inversores se alejan de compañías de combustibles fósiles de bajo rendimiento", señaló Toby Heaps, CEO de Corporate Knights.
Valores sucios que se estancan, alternativas que se disparan
De esta forma, apuntan que a medida que las tasas de las limpias aumentan y la demanda por los combustibles tradicionales decrece, las perspectivas son cada vez mejores. En efecto, esta decisión se presenta como la mayor oportunidad económica del siglo XXI.
El panorama queda en evidencia si se tiene en cuenta que la industria del carbón, por ejemplo, responsable por el 40% de las emisiones globales, está decreciendo rápidamente, en particular en Estados Unidos. De hecho, Peabody Energy, la mayor empresa privada del sector en el mundo presentó la solicitud para la protección de bancarrota. En esta misma línea, el Índice de Carbono de Dow Jones bajó en un 93% en los últimos cinco años.
Lo mismo sucede con las otras opciones sucias. El 52% de las compañías petroleras se han declarado en bancarrota desde 2015 y más de un tercio de las más grandes petroleras y gigantes del gas han adquirido deudas exorbitantes (superiores a US$1.500 millones).
Por el otro lado, en la actualidad, el mundo está añadiendo el doble de capacidad limpia que de carbón, gas y petróleo combinadas. Gracias a la tecnología, el mejor financiamiento y las economías de escala, se está volviendo más barata la generación solar y eólica. En respuesta a esto, por ejemplo, la cuota de mercado de viento se ha doblado cuatro veces en los últimos 15 años.