La iniciativa, que apuesta a conservar el patrimonio cultural y turístico de la mano de los chicos, tuvo como protagonistas a niños tucumanos, quienes pusieron en valor los alrededores del Cristo Bendicente en el Cerro San javier.
Con Tucumán como escenario elegido, Lan Argentina llevó a cabo la segunda etapa de su programa Cuido mi Destino en esa provincia. Siguiendo el espíritu de cuidado del patrimonio turístico que guía a esta iniciativa, voluntarios de Lan junto a más de 50 alumnos de la escuela de Comercio de Raco embellecieron y revalorizaron durante tres días los alrededores los alrededores del Cristo Bendicente en el Cerro San Javier.
Declarado de interés turístico en la provincia, el programa incluyó en esta nueva etapa la restauración de rejas perimetrales de la estatua, instalación de barandas en las escaleras de acceso para mejorar la accesibilidad y parquización con plantas autóctonas. Además, los alumnos pintaron el interior del Centro de Interpretación, generaron espacios de descanso con la instalación de bancos y por otra parte, restauraron los cestos de residuos existentes. A lo largo de los días de trabajo, los alumnos contaron con charlas educativas relacionadas con la conciencia turística, ambiental y sobre la promoción del turismo, actividad a cargo del Ente de Tucumán Turismo, la Fundación Pro Yungas y LAN.
“Cumplimos un año más de desarrollo de un turismo sostenible en la provincia, conectando la provincia con mayores frecuencias, promocionando los atractivos de la ciudad y trabajando con la comunidad tucumana en la revalorización de su patrimonio y cultura” señaló Martín Riverós, Jefe de Responsabilidad Social Corporativa y Medio Ambiente de Lan.
El programa fue lanzado en el 2009 y hoy llega a cuatro países de la región. Además, tuvo sus capítulos locales en Salta, Bariloche y San Juan.