Un mapeo de la Universidad Austral y Fundación Alimentaris relevó el crecimiento de estas inversiones durante 2023–2024, con fuerte actividad fuera del sistema financiero tradicional y señales mixtas en el mercado de bonos sostenibles. Además, si se suma la actividad de bancos y de bonos de BYMA, el financiamiento sostenible alcanza los US$ 4.373 millones.
El informe “Mapeo de Inversión de Impacto en Argentina 2023/2024”, realizado por la Universidad Austral y Fundación Alimentaris, identificó 214 inversiones por USD 41,6 millones realizadas fuera de bancos y del mercado de capitales, con la participación de 22 inversores y 89 organizaciones receptoras. La investigación también desarrolló un directorio de casi 140 actores vinculados a este tipo de financiamiento.
En paralelo, el análisis del panel de Bonos Sociales, Verdes y Sustentables (SVS) de BYMA evidenció una desaceleración respecto del crecimiento sostenido desde 2019. Durante el bienio se registraron 40 emisiones por US$ 1.132 millones, mayormente de proyectos energéticos eólicos y solares. Los bonos verdes concentraron la mayor parte de las operaciones, con Genneia como principal emisor.
Pese a esta moderación, la demanda por instrumentos SVS continúa superando con holgura la oferta: en 2023–2024 la brecha se mantuvo por encima del 40%, señal de un interés inversor insatisfecho en finanzas sostenibles.
El relevamiento incluye además datos de la banca: 12 entidades reportaron 121.849 créditos con criterios sociales, verdes o sostenibles por USD 3,2 millones, junto con fondos comunes de inversión y fideicomisos asociados.
El informe precisa que la inversión de impacto implica la búsqueda deliberada de resultados sociales y ambientales medibles junto con retorno financiero. Su base metodológica combinó encuestas, entrevistas y verificación de información pública.
Las instituciones a cargo destacaron que el mapeo aporta evidencia para fortalecer un ecosistema todavía en consolidación y fomentar la participación de nuevos actores. En total, el estudio registró USD 4.373 millones de financiamiento sostenible entre deuda, equity y cuasi-equity, equivalente al 14% de la inversión de impacto en Latinoamérica.